Creo que por esta temporada y con éste artículo, daré por finalizadas las jornadas del Skrei. Cinco recetas para todos los gustos, en las que he intentado dar un gran protagonismo a este delicioso tipo de bacalao.

Finalizo con esta ensalada templada que podréis recrear con un bacalao más mundano durante cualquier época del año. Ahora que nos adentramos en estaciones calurosas, sugiero hacer la versión fría, para que resulte más refrescante.

Como de costumbre, siempre dudo a la hora de categorizar mis recetas, al final me he decidido por una entrada aunque si os coméis esta ración, tal y como hice yo, resulta un plato principal único.

No necesitáis ser ningún artista de los fogones para luciros con esta elaboración, como podréis comprobar todos los pasos son sumamente sencillos.

Para los que sois muy clásicos con las ensaladas, os diré que hay más vida allá de la lechuga y el tomate. Probad a combinar diferentes productos y no tengáis miedo a utilizar frutas, además de crear una fusión espectacular, nos aportaran muchos nutrientes.

En este caso he utilizado el mango, escoged uno que no esté demasiado maduro ya que su manipulación será más engorrosa y las texturas cambiarán. Naranja, granada, piña…etc son otras frutas que combinan muy bien.

Ingredientes:

1 lomo de bacalao skrei, 1 mango, 1 bulbo de hinojo, 4 patatas pequeñas, aceite de oliva virgen extra, vinagre de mango, sésamo negro y sal.

Lavamos el hinojo y cortamos en juliana. Pelamos el mango y cortamos en cubos de aproximadamente 1 centímetro. Reservamos

Mientras ponemos a cocer nuestras patatas, enteras con piel, hacemos el bacalao. Previamente lo salaremos y freímos en abundante aceite a baja temperatura, estará hecho cuando veáis separarse las lascas, retiramos y separamos nuestras lascas.

Quitando algo de aceite pero usando el mismo, pochamos el hinojo, a mi me gusta que quede con un toque crujiente por ello no debemos excedernos. Escurrimos bien y conservamos en papel absorbente para retirar excesos de aceite.

Sacamos las patas y metemos en agua fría, pelamos y cortamos en rodajas gruesas.

Para el emplatado fui colocando la patata haciendo una circunferencia, en el centro rellené con el mando. El hinojo lo distribuí por el exterior de esa circunferencia de patata, según los tamaños colocamos las lascas de skrei, aliñamos con el aceite y vinagre, espolvoreamos sal Maldon y el sésamo negro. Decoramos con unas remitas de hinojo y unas flores de cactus.