Platea Madrid – Calle de Goya, 5-7 – Madrid Tlf: 915 770 025
El fin de semana pasado me acerqué a Madrid para disfrutar del magnífico espectáculo del Cirque Du Soleil. Su última producción Amaluna, resulta muy atractiva escenográficamente hablando y los números son de primer nivel entre los que destaco uno de equilibrios con palos.
La oferta gastronómica en la capital es fascinante y lejos de encerrarme en un restaurante al uso hice recorrido gastronómico del tapeo, todo un arte si está bien ejecutado. El Mercado de San Miguel y los numerosos locales en La Latina iban conformando mis menús de comida y cena.
Para el último día tenía reservada la visita a Platea. En la calle Goya 5-7, junto a la céntrica Plaza de Colón, encontraremos las instalaciones del antiguo cine Carlos III donde un gran espacio de multiocio gastronómico se abre a nosotros en sus casi 6.000m2.
Resulta apabullante por tamaño y nos requiere hacer una primera inspección ocular a todo lo que allí se ofrece antes de tomar una decisión de las múltiples que encontraremos.
Hace justo un año que se inauguró y por la oferta gastronómica que ofrece creo que es un modelo que permanecerá largo tiempo en funcionamiento. Siendo un domingo cualquiera el ambientazo que tenía es indicativo de una buena gestión del modelo empresarial.
Por no aburriros con demasiada información os daré unas pinceladas, ya que lo mejor es que os paséis y disfrutéis de la función. Esta se puede convertir en una sesión continua, pues no faltan lugares para relajarse y tomar unas buenas copas.
Empezando por abajo nos encontramos con El Foso, lugar donde encontraremos las mejores recetas del Mediterráneo que se entremezclan con una cocina internacional de vanguardia y una barra dulce. Esta última corre a cargo de Mamá Framboise donde se ofrecen las propuestas de Alejandro Montes.
La oferta internacional corre a cargo del mexicano Beso de sal, de Álex de la Fuente; el peruano Kinúa Perú Food, de Kiko Zeballos; el oriental Shikku, de Rafael Sánchez; y el italiano Fortino, de Ranieri Casalini.
El Patio, es la zona de entrada al recinto desde donde nos sentimos sobrecogidos por la majestuosidad del espacio. Zona de mesas en torno a la zona abierta del foso y todo alrededor nos encontraremos puestos donde abastecerse de quesos, embutidos, mariscos y las más suculentas tapas que podremos acompañar de cualquier bebida de la zona de bares. Debemos destacar que la oferta de coctelería Platea ha contratado los servicios de gestión de Diego Cabrera y Luca Anastasio.
En la primera planta nos encontramos con Arriba, la línea prêt-à-porter del cocinero Ramón Freixa que con sus dos Estrellas Michelín ofrece una oferta gastronómica para todos los públicos.
Seguimos subiendo y nos encontramos con El Palco, una barra preciosa donde poder degustar mil bebidas e infinidad de combinaciones de colores y sabores.
En la última planta accedemos al Club Platea, el secreto mejor guardado. Un club privado donde disfrutar de la intimidad combinada con la elegancia que rodea este ambiente.
Además, existe un espacio polivalente con cocina gestionado por ChefsLab (liderado por Sergio Pérez); y El Escenario del antiguo cine actúa como zona de eventos.
Sinergias es la marca creada por tres grandes chefs que suman seis estrellas Michelin y once soles de Guía Repsol: el madrileño Paco Roncero (con dos ‘premios’ de la guía francesa en La Terraza del Casino), el gallego Pepe Solla (con una estrella en Solla, en Poio, Pontevedra) y el asturiano Marcos Morán (con una distinción en Casa Gerardo, Prendes, Asturias). No hay barras diferenciadas para cada chef, sino barras (en el patio y la planta sótano) según cada concepto de comida, que firman de forma conjunta el trío de cocineros, que han creado varias marcas: A Mordiscos, con bocadillos, tostas, ensaladas, brochetas y empanadas; Castizo, con croquetas, fritura y tortillas; Entrecortes, con pollo asado, hamburguesas y perritos calientes; La Batea, con ostras y pulpo; y De Cuchara, con guisos, arroces y verduras.
El concepto es muy sencillo, buscamos la comida que más nos apetezca, la pagamos y nos la llevamos a la mesa en una bandeja de acero inoxidable si ya está hecha. En los casos de que requiera elaboración nos proporcionan una especie de beeper que vibrará iluminándose para indicarnos que debemos acercarnos a por lo encargado.
El servicio de bebidas lo atienden directamente en las mesas y debe ser abonado en el acto. En el caso del restaurante Arriba, ya cuenta con un servicio de sala.
Como ya os he comentado es un lugar en el que pasaríamos horas y horas enlazando comidas y cenas. Sólo le falta unos cocoons en plan japones para poder pernoctar y poder rematar con un desayuno.
En esta mi primera vez la cena se compuso de una tabla de quesos especialmente diseñada por Sabor a Dehesa. Una original combinación de colores y sabores del mundo: Un Stilton de mango y naranja; un cheddar Cahilli’s a la cerveza negra Guiness, un gouda de wasabi y otro al pesto rosso.
En kinua me decante por un ceviche mixto y en el Shikku una variedad de sushi elegida por mi y que compuse con niguiris de anguila y atun rojo, unos maki crunchy y uramakis ebi y de pato. Dos o tres cañas ayudaron a pasar un rato estupendo, pues no se me ocurre mejor película que observar a toda la gente que allí estaba congregada.
Fuego de Mortero 
Luego dices de mí, vaya maraton que te has marcado.
Amaluna me gustó, y sí, ese número de equilibrio de palos es de lo mejor, rescatado de montajes anteriores.
En Platea estuve dos veces.La primera no me gustó demasiado, pero como hacía poco que había abierto le di una segunda oportunidad. La segunda acabé en Freixa low cost, porque me parece incomodísimo andar arriba y abajo a recoger los platos. Ya había abierto el Club privado, una fórmula bastante antigua ( en Amsterdam la usan hace más de 40 años para los clubs porno) al final un pretexto para los fumadores no tengan que salir a la calle a fumar un cigarrillo.
El espacio es espectacular y merece la pena la visita, tomar una caña, una tapita,..pero para comer comer. no se yo
Besinos
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Anda, anda que comparado con lo del cumpleaños esto no fue nada. Toda la razón, es un sitio de picoteo, informal. El tema delos beepers me hizo su gracia, por lo menos no estas esperando de pie y como estaba en el foso los quesos me los baje de mano aunque es cierto que como hubiese pedido de la parte del patio hubiese sido un coñazo.
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