Esta es una receta que encanta a los niños y es una manera de que coman pescado o verduras pues se puede hacer de infinitas variantes, bonito, cabracho, mejillones, centollo, espárragos, calabacín, berenjenas…etc.

Es un entrante muy socorrido y muy fácil de elaborar prueba de ello es que en muchos restaurantes te lo ofrecen como aperitivo de cortesía.

Para este he utilizado bonito pero tranquilamente podéis utilizar un par de latas mejillones escabechados o dos latas de sardinillas…..no hay limites.

Ingredientes:

250grs de bonito, 2 rebanadas de pan de molde, 2 huevos, 200ml de nata líquida, 1/2 vaso de leche, 2 cucharadas de salsa de tomate natural, un molde untado de mantequilla.

En un vaso de batidora o en cualquier otro recipiente alto se ponen todos los ingredientes y se baten bien, se echan en el molde y este se mete a su vez en un recipiente de horno con agua que le cubra unos dos dedos a una temperatura de 190º. Cuando este un poco dorado se tapa con papel de aluminio y se deja cocer hasta que al introducir un cuchillo, este salga limpio. Una vez que haya enfriado se desmolda y se sirve acompañado de unos panecillos tostados con mayonesa y/o salsa rosa.

Consejos y trucos:  Si vais a elaborarlo con alguna verdura previamente pasarlas por la plancha al igual que si optáis por utilizar bonito natural u otro pescado