Tapas Areal – C/ Mexico, 36 – Vigo     Tlf:   986 41 86 43

Despertar en una habitación de hotel de una ciudad diferente a la tuya suele activarme más de la cuenta, me recorre una sensación de nerviosismo por saber cuantas cosas diferentes me pueden suceder ese día que comienza.

Como ya os comente la opción del hotel Inffinit es extraordinaria, sobre todo si tenéis la suerte de coger una oferta irrenunciable en una de sus suites, concretamente la 701. No soy de gastar dinero en habitaciones, me parece absurdo cuando me paso 15 horas fuera de ellas, pero a nadie amarga un dulce y en este caso su precio estaba en el rango de lo que suelo pagar por habitaciones normales.

La calidad del sueño, como lo llaman en esas encuestas que te dejan para que rellenes, ha sido magnifica y salir a la terraza a desperezarte resulta muy energizante.

Me inquieta mucho no ser yo el que haga los planes, es la falta de costumbre, pero en esta ocasión nadie mejor que mi amiga Ana como maestra de ceremonias, quedamos con su hermana Pily y su prima Fina, también mejicana, para comer. El lugar que eligen es Tapas Areal, curiosamente ubicado en la calle México, se trata de una comida informal de picoteo ya que por la noche fui el chef invitado para prepararles un arroz.

 

El restaurante se encuentra en pleno centro, a un paso del Corte Ingles, tiene una entrada pequeña y una decoración moderna en su interior. Nos atendió un camarero muy simpático que tenía una forma muy peculiar de cantarnos las especialidades y platos fuera de carta.

Todo lo probado era de muy buena calidad y estaba muy rico aunque deberían prestar un poco más de atención a la forma de presentar los platos, alguno de ellos como la brocheta peco en exceso de guarniciones y en el caso de los postres no resultan muy cautivadores aunque os aseguro que estaban deliciosos.

Ya por la noche y tras acopiar en el Corte Ingles preparé un arroz negro con chipirones, atún rojo y langostinos acompañado de un rico tequila a los postres. Tanto el arroz bomba que había comparado en la tienda Espacio Store de mi amiga Bea como el caldo que había preparado para ganar tiempo, lo lleve expresamente desde Oviedo.