Por muy poco navideño que me declare, uno es incapaz de abstraerse a las fechas que corresponden y últimamente me ha dado por querer ofreceros alguna alternativa diferente a los clásicos menús. No hace falta ver los telediarios, a poco que salgamos a comprar, todos sufrimos la insostenible escalada de precios donde un billete de 50€ no rinde ni tan siquiera con lo que otrora se consideraban básicos. Ya os comenté hace poco que ni la casquería se salva, lo que eran despojos tienen precio de solomillo y ni hacer callos resulta económico.

Una nueva receta de pollo se antoja muy navideña si le damos el carácter apropiado, en este caso guisado a la naranja con un montón de aromáticos. Quien dice pollo, dice pato, pitu de caleya, capón, pavo, pularda, perdiz..etc dependerá de las tradiciones de la zona y de nuestros bolsillos.

En el blog podéis encontrar numerosas elaboraciones con esta ave tan socorrida, a la cerveza, a la sidra, con frutos rojos, al miso con almendras, al tamarindo y chipotle con pera, a la chilena, en formato nachos, en una quiche o unos nuggets ras al hanut. Se trata de buscar lo que hay alrededor, jugar con especias, bebidas, frutas y verduras para obtener ricas elaboraciones con diferentes sabores, salirse del camino tradicional hace que no exista la monotonía.

Los aromáticos juegan un papel fundamental en esta receta, el jengibre, clavo, canela, cardamomo, pimienta de Jamaica, chile thai, vinagre de arroz y azúcar moreno junto al licor de naranja y el zumo y ralladura de las propias naranjas, hace que nuestra salsa reducida se asemeje más a un perfume que a una receta.

Aunque he tratado de dar una presentación vistosa, quizás para vuestros estándares no cumple la apariencia navideña. Os propongo dos alternativas con la misma base, deshuesar y con una papel film hacer una especie de embutido, enfriar y envolver en hojaldre, horneamos y salseamos; la otra opción podría ser hacer un desmigado, mezclar con foie micuit y servir en unas tartaletas que luego salseamos. Ya veis que con una misma base podemos complicarnos a poco que le demos una pensada.

Para esta receta aunque compré un pollo entero, me reservé las pechugas para hacerlas al tikka masala. Mis gustos son caprichosos y las pechugas me parecen algo muy seco, siempre las uso para una receta alternativa como la Ensalada de Pollo para mis sándwich americanos, rellenarlas o lo que pinte

Aquí, en la vídeo receta podéis ver lo fácil que resulta y sobremodo, comparar una buena salsa con la excelencia del mismo líquido reducido a fuego fuerte.

Ingredientes:

1 Pollo, 2 dientes de ajo, 1 puerro, 1 cebolla, 3 zanahorias, 4 naranjas, 700ml de caldo oscuro, 2cl de vinagre de arroz, 4cl de Cointreau, 1 trozo de jengibre, 1 guindilla thai, 3 clavos, 6 semillas de cardamomo, 1 rama de canela, unas bolitas de pimienta de Jamaica, 2cds de azúcar moreno, sal y AOVE.

Comenzaremos la receta quemando los restos de plumas y salpimentando nuestro pollo. En una cacerola, preferiblemente una cocotte, ponemos un par de cucharadas de aceite de oliva virgen extra y empezamos a dorar el pollo.

Paralelamente pelaremos y cortaremos a groso modo los ajos, puerro, cebolla y zanahorias en rodajas, cuando demos la vuelta al pollo le agregamos todas las verduras y rehogamos. Retiramos el pollo a una fuente y seguimos pochando las verduras un par de minutos más. Reservamos junto al pollo.

Echamos en la cacerola el azúcar, agitamos para esparcir y dejamos a fuego medio que se vaya formando el caramelo. No hemos de remover, se nos cristalizaría. Mientras, pelamos el jengibre, sacamos una peladura de una naranja, hacemos el zumo de tres naranjas y de la cuarta la cortamos en cuartos sin pelarla.

Con el azúcar fundido en un punto dorado, no queremos que se nos haga demasiado o amargará, añadimos todos los aromáticos, el clavo, guindilla, canela, cardamomo, pimienta de Jamaica y la peladura de naranja. Echamos el zumo de naranja y comenzamos a diluir el caramelo, agregamos el vinagre y el licor de naranja, subimos el fuego para evaporar el alcohol y terminar de desglasar el caramelo.

Añadimos el pollo con las verduras, los gajos de naranja y el jengibre, echamos todo el caldo oscuro, mezclamos y tapando la cacerola a fuego medio dejamos cocinarse durante 40 minutos al chup chup. Transcurrido el tiempo retiramos las piezas de pollo y la zanahoria, colamos la salsa y desechamos el resto porque buscamos una líquido fino. Llevamos esa salsa a fuego máximo para reducirla a un punto espeso donde concentre todos los sabores.

Para la guarnición además de la zanahoria emplatamos arroz basmati con un aro, decoramos con cebollino picado, ralladura y rodaja de naranja, salseamos y ya lo tenemos listo.