Al igual que suele pasar con los delanteros de fútbol que tienen rachas de no meter un gol ni al arco iris, si son auténticos killers del área, acaban por convertirse en pichichis de sus equipos.

A mi me ha pasado algo parecido, tuve una racha de vagancia provocada por la de falta de ideas y de repente me surgen recetas como la de hoy, nada como trabajar con presión.

Tenía unos lomos de salmonetes a los que debía dar salida, pues realmente sólo los compre para utilizar las cabezas y espinas para un fumet. Mi planta de menta con los últimos calores estaba desmadrada y era momento de hacer algo con ella, además un último trozo de queso ahumado de Pría remataría la idea encajada a calzador en menos de media hora.

Como veis no requiere demasiados ingredientes y el resultado además de atractivo resulta muy interesante.

Ingredientes:

1 salmonete, nata para cocinar, queso ahumado de Pría, hojas de menta, aceite de oliva virgen extra y sal.

En mi caso los salmonetes ya me los había medio preparado mi pescadera Isa, los lomos impecables listos para pasarles un agua y con cuidado quitarle las espinas, una labor tediosa pero gratificante sabiendo que no te encontraras ninguna.

Por otro lado troceé el queso en pequeños tacos que puse en un cazo, les di algo de calor y cuando empezaron a fundirse añadí un buen chorro de nata, llevar a ebullición para que espese. La salsa de ahumado de Pría hecha en un pis pás.

Ahora toca triturar las hojas de menta en un robot, añadimos aceite y volvemos a triturar mas fino emulsionando. Pasamos a un plato donde pondremos nuestros lomos de salmonete previamente salados, dejamos unos minutos marinar.

Mientras volvemos a dar un poco de calor a la crema y ponemos en el centro de un plato redondo, fácilmente haremos un círculo  moviendo el plato con cuidado. Pasamos los salmonetes por la sartén bien caliente, con un minuto por cada lado estarán suficientemente hechos sin que se nos seque.

Emplatamos colocando los lomos al centro y decorando con unas gotitas del aceite de menta haciendo la circunferencia, una hojita de menta para rematar el conjunto y ya tenéis un plato bien sencillo.

Obviamente podréis utilizar muchos tipos de queso pero recordad que no pueden matar en exceso el sabor de nuestros salmonetes así que nada de ser rompedores y poner una crema de Cabrales.

He cometido un grave error de emplatado, la elección del color no ha sido la adecuada. Un plato oscuro es el adecuado para contrastar colores.