Lux & Burg – Avda. Tibidabo 2-4 – Barcelona Tlf: 933 48 82 22
Aunque se trate de un blog gastronómico, cuando viajo siempre me gusta aportar alguna pincelada de los sitios que visito. No es que vaya a descubrir la pólvora a ningún viajero, especialmente en una ciudad como Barcelona, pero quizás os pueda servir a modo de organización.
En esta ocasión nos alojamos en la parte alta de Barcelona, concretamente en el Silken Sant Gervasi, a un paso de General Mitre con Balmes. Un hotel de 3* con una espaciosa habitación doble que por semana tenía muy buena tarifa y cumplió perfectamente la función de cercanía con la nueva residencia de mi hermana.
Al llegar relativamente temprano la habitación no estaba disponible así que a eso de las 11 decidimos quemar la primera etapa turística visitando el punto más alto de la ciudad, el Parque del Tibidabo. Hacía más de 30 años que no subía por esta zona y sufrí una pequeña desilusión, el funicular estaba fuera de servicio por lo que la alternativa para visitarlo era un autobús que por otro lado me enseñó la magnitud de esta montaña. Una carretera de unos cuantos kilómetros, llena de sufridos ciclistas y moteros que querían aprovechar el fenomenal domingo de primavera avanzada.
La bajada a zona «civilizada» coincidió con las 14:30, a un lado de la Avda del Tibidabo el ABAC que tan buenos recuerdos me trajo pero que en esta ocasión no tocaba visitar. Justo en frente en el número 2-4 en un edificio que me dijo mi hermana habían rehabilitado hace poco, había una hamburguesería que tenía nuestro nombre, justo se estaba levantando una pareja de la soleada terraza.
Ya habría tiempo de comer algo más gastronómico y una hamburguesa no venía mal para reponer fuerzas después de tanta caminata empinada. Lo primero, es lo primero, una jarra de cerveza helada para aplacar la sed.
El local tiene unas cuantas mesas a nivel de calle pero engaña bastante porque el gran comedor se encuentra bajando unas escaleras.
Los nachos no estaban mal si no fuese porque le echaron salsa sweet&chili, un sinsentido si lo que trataban era de aportar un toque picante, para eso están los jalapeños y no una salsa thai.
La ensalada Caesar estaba bastante bien.
Por aquello de ahorrar calorías me decidí por una hamburguesa de pollo tipo hindú, con una salsa de curry. Me gustó bastante al igual que las patatas fritas que pedimos como complemento.
Si las hamburguesas no son lo vuestro al lado hay una Tagliatella. Hora de ir a hacer el check in al hotel.
Deja una respuesta