Son realmente curiosos los gustos de las personas, unos somos de salado, otros de dulce  y luego está el caso de mi madre que aún siendo salada, la repostería no se le da nada mal y tiene la culpa de aparecer por casa en plan vecina americana con una tarta, unas magdalenas, un pan..etc.

Sólo hay que ver mi sección de postres para darse cuenta que esto no es lo mío por varias razones: me llega con un par de cucharadas de algo dulce para rematar una comida y la elaboración supeditada a medidas estrictas no es lo mío, voy por libre, soy una oveja descarriada.

Aún con todo, en una de mis visitas a comer me ofreció un postre de tartaletas de fresa que parecía fácil y estaba muy rico. Ya os avancé en Facebook la receta, pero era hora de darle un intento y nutrir esta sección.

Podría llamarse la receta de la paridad a cuatro. Cuatro ingredientes que van en la misma medida y en el caso del fruto seco podeis utilizar cualquier variante, almendra, avellana, pistacho, piñones, anacardos…etc, dependerá de vuestros gustos.

En función de la cantidad que preparemos nos servirá para unas tartaletas, una tarta, galletas e incluso unas bolas rellenas.

Ingredientes:

100 grs de almendra molida, 100 grs de mantequilla, 100 grs de azúcar y 100 grs de harina

Primeramente fundimos la mantequilla y dejamos templar, añadimos el azúcar y mezclamos hasta obtener una crema, incorporamos la almendra molida y volvemos a mezclar. Finalmente añadimos la harina, aquí os recomiendo mezclar con un tenedor, poco a poco irá cogiendo la consistencia de masa.

Una vez lista ponemos el horno a precalentar, rellenamos el molde elegido, no hace falta engrasarlo. Metemos en el horno a 180º durante 10-15 minutos, ireis viendo como coge color. Sacamos y ponemos en una rejilla a enfriar. Desmoldamos y rellenamos al gusto.